Ya en 1976, el guitarrista Paul Waaktaar-Savoy y el teclista Magne Furuholmen crean la banda Bridges. Pero no lograrán triunfar y, tras varios impases, no será hasta 1982 cuando fichen al vocalista Morten Harket y rebauticen el grupo como A-ha. Cargados de ilusión e imbuidos de la Nueva Ola musical tecno, marcharán a Inglaterra en busca del éxito. Pero allí toparán con la cruda realidad y, tras varios meses de estancia londinense, sin expectativa alguna y agotado el poco dinero que tenían, se verán obligados a regresar a Noruega. Inasequibles al desaliento, recobrarán nuevas energías y volverán poco después a la aventura londinense hasta que, a finales de 1983, logren por fin un contrato discográfico. Como canción gancho, llevan una nueva versión de un tema de su antigua banda, "The Juicyfruit Song", al que ahora llaman primero "Lesson One" y, tras varios arreglos, editan finalmente como "Take On Me". El primer resultado: un fracaso absoluto del que apenas se venden unos cientos de copias. Pero, a estas alturas, está ya claro que a estos noruegos nada les iba a arredrar. Convencidos del potencial de la canción y bien secundados por su productor, Alan Tarney, editan un vídeo del tema técnicamente -entonces- novedoso, mezclando escenas reales con dibujos animados en blanco y negro. El acierto será total. En pleno boom del vídeo como factor clave promocional, la canción tendrá por fin el éxito buscado. Eso, junto a su fácil melodía, el contundente ritmo percusivo, unos buenos teclados y, sobre todo, la gran interpretación vocal de la canción, catapultarán al grupo a lo más alto de las listas musicales de medio mundo.