Esta cantante gallega de nacimiento y asturiana de adopción, estudió piano, solfeo, bel canto y ballet, teniendo claro su interés por dedicarse profesionalmente a la interpretación. Con 19 años se trasladará a Madrid para comenzar con actuaciones menores y como acompañante coral, logrando ir haciéndose un hueco musical con su vertiente más rockera, grabando su primer álbum en 1982, con temas propios y de autores como Roque Narvaja, Noel Soto o Ramoncín. "No aguanto más", uno de los sencillos del disco, le dará a conocerse ante el gran público. De esta primera etapa rockera, en la que colaborará con otros autores como Rosendo Mercado, Elena Santonja, Hilario Camacho, Santiago Auserón o Antonio Vega -y con tres álbumes en su haber- quedarán otros temas como "Deseo de silencio", "Ciudad sin ley" o "Rufino". A finales de los ochenta, Luz dará un giro a su carrera, explotando su vena interpretativa más pop y melódica, con su trabajo "Luz V" y temas como "No me importa nada", "Te dejé marchar" o "Loca". Tendrá un gran éxito que se acrecentará en su siguiente trabajo, "A contraluz", que incluirá las canciones "Piensa en mí" y "Un año de amor", que Almodovar utilizará en su película "Tacones lejanos".
A partir de ese momento, y ya como cantante popularmente consagrada, se afianzará una carrera con resonancia internacional y nuevos temas como "Dame un beso", "Entre mis recuerdos", "Ni tú ni yo" o "Lo eres todo", el tema que hoy te proponemos, una adaptación de la balada de Vainica Doble, tan solemne como rotunda y excesiva en su letra, en donde la voz de Luz expresa toda su fuerza y hondura, con unos arreglos a la altura de su magistral interpretación.